La Congregación
Congregación de “Las Hermanas de Caridad de Nuestra Señora del Buen y Perpetuo Socorro”
La Congregación de las Hermanas de Caridad de Nuestra Señora del Buen y Perpetuo Socorro ha sido fundada por Madre María Agustina en el año 1850 en una tierra de plena luz y esplendor, la Isla Mauricio.
Por una inspiración mística, el día de su Bautismo y de su Primera Comunión, siente fuerte en su corazón de querer ser toda de Jesus y de su Madre María.
Llega a ser Hermana de caridad y con su donación a los más pobres, a los enfermos y a la juventud abandonada lleva el amor de Cristo y la autenticidad evangélica a quien se encuentra en la necesidad y a quien tiene sed de verdad.
Hoy la Congregación de las hermanas de caridad del Buen y Perpetuo Socorro, con su carisma y presencia está presente en Isla Mauricio, Bélgica, Italia, Argentina, Francia, Inglaterra, India, Filipinas, Polonia, Congo, Corea del Sur, Indonesia y Perú.
Madre que cura con diligencia y caridad heroica lo sufrimientos en el cuerpo y en el espíritu en los cuales ve el rostro de Cristo.
Por una inspiración mística, el día de su Bautismo y de su Primera Comunión, siente fuerte en su corazón de querer ser toda de Jesus y de su Madre María.
Llega a ser Hermana de caridad y con su donación a los más pobres, a los enfermos y a la juventud abandonada lleva el amor de Cristo y la autenticidad evangélica a quien se encuentra en la necesidad y a quien tiene sed de verdad.
Hoy la Congregación de las hermanas de caridad del Buen y Perpetuo Socorro, con su carisma y presencia está presente en Isla Mauricio, Bélgica, Italia, Argentina, Francia, Inglaterra, India, Filipinas, Polonia, Congo, Corea del Sur, Indonesia y Perú.
¿Quién es la Hermana de Caridad del Buen y Perpetuo Socorro?
Amiga que ayuda a los jóvenes a descubrir el proyecto de amor de Dios sobre ellos para una presencia significativa en la Iglesia y la sociedad."Las obras de Dios se realizan con dulzuta, firmeza y caridad"
~Madre María Agustina
Madre que cura con diligencia y caridad heroica lo sufrimientos en el cuerpo y en el espíritu en los cuales ve el rostro de Cristo.
Hermana que vive en fraternidad, es acogedora, brinda amistad y alegría.
Misionera que anuncia la Palabra de vida con la fuerza de la fe y el servicio atento y generoso.
Con la profesión pública de los consejos evangélicos de castidad, pobreza y obediencia, de nuestra vida de oración, de nuestra vida fraterna y de nuestro apostolado, queremos testimoniar que Dios es amor, siguiendo el ejemplo de nuestra fundadora, que ha sabido manifestar la ternura infinita de Dios a los más pobres, a los más abandonados, a los enfermos, a los niños y a los jóvenes.
Carolina Lenferna de Laresle, era el nombre de bautismo de Madre Agustina, nació el 20 de Marzo de 1824 en Isla Mauricio (África), es aquí donde encuentra su vocación y escucha la voz de Dios, que se manifiesta en su corazón, en los que la acompañan, en los representantes de la Iglesia Local, y sobre todo en las necesidades de los más abandonados.
Su vida fue un testimonio de amor incomparable, su alma llena de caridad llevó la ternura de Dios a cada ser humano, aún aquellos que se mostraban más indiferentes y agresivos. Buscaba siempre la voluntad de Dios y recorría todos los caminos que la llevaran a construir el Reino de Dios. Con la caridad heroica cambió el mundo, trasformó almas y las llevó a Dios y a su Santa Madre.